En una cultura de televisión donde se pueden discutir los problemas más íntimos es sorprendente que el tema del sistema digestivo siga siendo tabú. Parece que cada día en la televisión se enteran de los últimos tratamientos para infecciones vaginales y cada semana alguien está hablando sobre la salud de la próstata. Bueno, es hora de que el sistema digestivo, o el intestino, salga del closet.
Si eres como la mayoría de la gente, todos se toman su sistema digestivo por sentado. Mientras está trabajando bien, rara vez piensan en ello. El sistema digestivo es un gran caballo de trabajo confiable del cuerpo. Siempre está esperando pacientemente a que el próximo lote de alimentos baje por la tubería (esófago). Que nunca duerme, ni se detiene a tomar un descanso y que nada de esto requiere una acción consciente de su parte. Su intestino hace posible que usted disfrute de un pollo frito sin tener que entender nada acerca de la compleja ciencia de la química digestiva.
Tu intestino te alimenta
Usted puede pensar que usted alimenta a su intestino. En realidad, su intestino lo alimenta a usted. La mayoría de los alimentos que usted come serían tan mortales como el veneno, si llegaran directamente al torrente sanguíneo. Sus intestinos se pueden describir mejor como una planta de «separación» de alimentos muy elaborados. A excepción de la fibra dietética (las cáscaras de nueces, el salvado de trigo) su intestino separa prácticamente todo lo que usted come en componentes más pequeños que su cuerpo puede utilizar. Su intestino convierte la grasa del tocino crujiente de su desayuno en ácidos grasos más pequeños. Igualmente, convierte la proteína de la chuleta de cordero en la cena en aminoácidos más pequeños. Cambia los hidratos de carbono grandes de su puré de papas en glucosa con azúcar. Luego pasa estos nutrientes más sencillos a su sistema sanguíneo (los alimentos que sus trillones de células pueden utilizar para la energía, el crecimiento y la reparación del cuerpo). Este proceso de descomposición de grandes moléculas en sus partes más pequeñas que el cuerpo pueda utilizar se denomina digestión. Sin la magia de la química de la digestión, a pesar de que se coma en grandes cantidades, usted se puede morir de hambre. Así que, tu intestino te alimenta. Su sistema digestivo desde la boca hasta el esfínter anal es un tubo muscular único, largo, hueco, de unos treinta metros de largo. Sin ningún esfuerzo de su parte, estos músculos mueven los alimentos y líquidos a lo largo del tracto digestivo para su procesamiento.
El esófago
Por supuesto, la digestión comienza cuando la comida se rompe en trozos más pequeños por sus mandíbulas y dientes y se mezclan con la saliva. Después de masticar y tragar, la comida es impulsada por los diez centímetros del esófago hacia dentro de su estómago. En el extremo inferior del esófago, una válvula de una vía (llamada esfínter esofágico inferior) evita que el contenido del estómago vaya hacia arriba, hacia el esófago. El mal funcionamiento de esta válvula es la causa más común de la acidez estomacal.
Su bolsa del estómago
La mayoría de los animales, incluidos los seres humanos, tienen un solo estómago, pero los pájaros, las vacas y ovejas tienen dos o más cámaras en sus estómagos. Vacío, el volumen de su estómago «bolsa» es menos de media taza. Al comer, la pared muscular puede relajarse y expandirse para contener hasta casi tres litros de sustento. Luego, cada veinte segundos, contracciones llamadas ondas peristálticas a través de su estómago aprietan suavemente la parte superior, con más fuerza hacia abajo. Este movimiento de agitación mezcla las partículas de los alimentos con ácido clorhídrico, enzimas y la pepsina. Las enzimas son como palancas que rompen las moléculas de gran tamaño. Estos productos químicos fuertes producidos por el estómago pueden convertir los alimentos en otras sustancias mas degradadas. Finalmente, la comida ahora licuada se transporta a través de otra válvula de una vía hacia el intestino delgado llamada píloro. Sólo el agua, el alcohol y ciertos medicamentos son absorbidos por el estómago ya que la absorción de la mayoría de los alimentos se produce en el intestino delgado.
Hígado y Páncreas
Hay también dos órganos sólidos, el hígado y el páncreas, que producen jugos digestivos que aceleran el proceso de separación. Estos jugos llegan al intestino delgado a través de pequeños tubos o conductos. El hígado produce bilis que se almacena temporalmente en la vesícula biliar y es llevada por el conducto biliar para mezclarse con la comida. El páncreas produce enzimas que se transportan por el conducto pancreático para ayudar en el proceso de la digestión. El páncreas también tiene la tarea de producir insulina para regular el nivel de azúcar en la sangre. Su mal funcionamiento conduce a la diabetes.
Intestino delgado
En el centro de su abdomen se encuentra el intestino delgado, de 6 metros de largo. Es aquí donde se lleva a cabo el proceso final de la digestión y la absorción de nutrientes de los casi 8 litros de alimentos, líquidos y secreciones digestivas que se procesan cada día. El intestino delgado se divide en tres secciones: la primera parte llamada duodeno, la porción media, conocida como el yeyuno, y la última parte llamada íleon. El intestino delgado está lleno de intrincados conjuntos de músculos que no están nunca en reposo absoluto. Un grupo produce un movimiento oscilante en donde se revuelven los alimentos y los jugos digestivos. Otro conjunto de músculos producen una acción de forma de onda, las olas empujan el contenido a lo largo de unos pocos centímetros. Estas contracciones musculares causan una onda, es algo similar a una cinta transportadora.
Para maximizar la absorción, las moléculas de los alimentos deben estar en contacto con un gran número de células especializadas. Para lograr esto, las paredes de los intestinos están cubiertas con proyecciones similares a pelos microscópicos llamados micro-vellosidades. Cada centímetro cuadrado de intestino contiene 10 mil millones de micro-vellosidades aproximadamente. Esto aumenta drásticamente la superficie para la absorción de los alimentos. De hecho, si el interior del intestino delgado fuera solo liso, tendría solamente alrededor de 1000 centímetros cuadrados de superficie de absorción. En su lugar, a causa de estas micro-vellosidades, tiene casi 4000 metros cuadrados de absorción (casi la misma superficie de dos canchas de tenis!). Las micro-vellosidades contienen células especiales que permiten la absorción de nutrientes hacia el torrente sanguíneo. Toma al intestino delgado, alrededor de unas cuatro horas procesar la comida. Una vez que todas las «cosas buenas» se retiran, su intestino pasa la indigesta papilla acuosa restante a los últimos cinco pies de su tracto digestivo: el colon.
Su Colon – Reciclaje del agua preciosa
A veces llamado el intestino grueso debido a su mayor diámetro, el colon es en realidad mucho más corto que el intestino delgado, sólo tiene alrededor de 1.5 metros de largo. El colon comienza en el ciego situado en la parte inferior derecha de la cavidad abdominal. Su apéndice está conectado al ciego, y es por eso que la apendicitis causa dolor en el lado derecho inferior del abdomen. En la unión del intestino delgado y el ciego esta una válvula, llamada la válvula ileocecal, que impide que el material desde el ciego se mueva hacia atrás en el íleon. Sigue al ciego, el colon ascendente hacia arriba por el lado derecho, justo debajo del hígado hace un giro brusco. El colon continúa por el abdomen superior, como el colon transverso, sólo para hacer otra fuerte caída y continuar recto por el lado izquierdo como el colon descendente y luego en un segmento en forma de S-llamado colon sigmoides. Esta es el área donde se encuentran la mayoría de los «focos» de diverticulosis. El colon sigmoides se conecta a las últimas seis pulgadas llamado el recto. El recto continúa directamente en el canal anal corto que termina con el esfínter anal. El esfínter anal es una válvula que debe permanecer cerrada para evitar la incontinencia fecal y se abre correctamente para permitir una evacuación intestinal. Algunos observadores han mencionado que el músculo del esfínter anal es como el músculo social, porque es capaz de evitar las deposiciones accidentales y distinguir entre el paso de gas en lugar de sólidos y líquidos.
Si bien el esófago, el estómago y el intestino delgado contienen muy pocas bacterias o gérmenes, el colon está lleno de miles de millones de bacterias. De hecho, hay más bacterias intestinales en el colon, que los seres humanos que han vivido. En su mayor parte, estas son las bacterias sanas que no causan problemas, ya que se limitan a la apertura interna del colon. Si existe un agujero en la pared del colon y la bacteria se escape hacia la cavidad abdominal, se produce una infección grave llamada peritonitis.
No hay absorción de nutrientes en el colon. El trabajo principal del colon es recuperar el exceso de agua de los residuos intestinales y reciclarla en el corriente sanguíneo para su reutilización. Piense en ello como una «planta de tratamiento de agua.» A medida que avanza a lo largo del colon, los residuos líquidos poco a poco se secan y se forma un lodo sólido que puede ser expulsado con un movimiento intestinal, también conocido como heces.
Cuando su sistema digestivo está funcionando normalmente, no debería ni siquiera ser consciente de todas estas funciones complicadas. Es un «piloto automático» en espera de servirle. Sin embargo, a veces su mal funcionamiento conduce a síntomas molestos y vergonzosos, y, en ocasiones, puede ser el sitio de una dolencia grave. Cuando esto ocurre es cuando usted comienza a tomar conciencia de su sistema digestivo. No se sienta avergonzado si usted presenta problemas intestinales. Consulte a su médico.
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Gastroenterología